"Partido de General Sarmiento La Municipalidad y el Ferrocarril de
Buenos Aires al Pacifico"
La cabeza del Partido es el conglomerado de dos poblaciones casi
linderas, y que se conocen por "San Miguel" y "Bella
Vista", las que ya existían desde 1872 con su trazado
y su viabilidad reconocidas por
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Gentileza
Luis Massa
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el partido de Moreno, al que pertenecían antes de la Ley de 1889.
El origen de esas poblaciones es el siguiente: en 1872, el lugar donde
hoy se encuentran pertenecía a una suerte de estancia,
de una extensión de 2600 varas de frente al río
de "Las Conchas", por una y media legua de fondo, cuyo
dueño, Don Fortunato Poucel, lo vendió por fracciones
a los señores Reyes, Asconape, Cafferata, Desarnaux, y
otros, y el resto a un sindicato de capitalistas (según
escritura de octubre 3 de 1872, dejando una hipoteca que fue cancelada
en abril 3 de 1873) compuesto por los señores Joly, Chabry,
Mattaldi, Sourdeaux, Duchenois, Chapeaurouge, Pereyra y otros,
los cuales bajo la razón social de "Sociedad Fomento
de San Miguel", se propusieron entregar aquel campo a la
especulación, y fundar allí poblaciones; para lo
cual era menester subdividir la tierra, lotearla, establecer la
viabilidad general de la deseada población, etc. Esa mensura
detallada fue hecha por el agrimensor Don Adolfo Sourdeaux, quien
hizo los primeros planos de los localidades llamadas de "San
Miguel" y "Bella Vista", y sus inmediaciones.
Dicho plano es el que ha servido de base a todos los planos sucesivos,
en los distintos remates que fueron atrayendo población
a los nuevos pueblos. Estos planos, son, por orden cronológico,
los siguientes: 1° el original de 1871, 2° el del remate
de 1872, y de los sucesivos hasta 1876, y una serie de planos
para venta de diferentes fracciones, reproduciendo siempre el
mismo trazado original, muy especialmente en el trazado de las
calles principales que aseguraban su cómoda y amplia viabilidad.
Además, la "Sociedad Fomento de San Miguel" en
su presentación ante el P. E. de la Provincia, con motivo
de la fundación del nuevo Partido, confirmó solemnemente
que enajenaba a perpetuidad, como lo habían establecido
los planos, el terreno ocupado por dicha viabilidad, y además
ofrecía escriturar en beneficio de la población
y para que se construyeran los edificios públicos, los
terrenos siguientes: 1º una manzana para edificios públicos;
2° dos fracciones en distintas manzanas, una para Iglesia
y otra para Colegio; 3° tres manzanas para cementerio, y dos
plazas, una en el pueblo y otra al confín de su traza.
Es en virtud de esa declaratoria que la actual Municipalidad de
General Sarmiento tiene terrenos fiscales en el Partido.
Pues bien, la arteria principal de la viabilidad de "San Miguel"
la constituyó desde un principio una calle de 60 varas
de ancho, en una extensión de unos ocho kilómetros,
y que corre de S.E. a N.O. desde el río de Las Conchas.
A ella convergen los trazados de la planta urbana de San Miguel
y Bella Vista. Buscando favorecer la nueva población, la
"Sociedad Fomento", aprovechando la presentación
que en 1870 hizo Don María Billinghurst de su proyecto
de Ferrocarril de Buenos Aires a Rosario, con el fin de obtener
que pasara por aquella localidad y tuviera allí una Estación,
cedió al efecto una faja de 20 varas de ancho en el centro
de la calle principal y a lo largo de su eje, de modo que quedaran
a ambos costados dos caminos de 20 varas de ancho cada uno. Así
consta en todos los planos cuya lista se ha mencionado anteriormente.
Pero el proyecte. Billinghurst fracasó definitivamente
en 1876, y fue abandonada la idea, quedando por io tanto nula
la indicada cesión.
En este estado de cosas, fue dada la concesión de la línea
del llamado Ferrocarril Pacifico, y al aprobar su trazado, en
la sección de Buenos Aires a Mercedes, la Empresa Clark
-que había tenido conocimiento de la proyectada donación
a la línea Billinghurst, se creyó arbitrariamente
heredera de aquel fracasado proyecto, é indicó su
línea en la misma dirección de la calle citada,
pero en lugar de ubicar la faja de 20 varas en el centro de dicha
calle, cono lo había hecho la "Sociedad Fomento",
le convino hacerlo de una manera caprichosa, ocupando casi todo
su ancho por diversas curvas.
Casi en la misma época el Tranway Rural, cuyo trazado en la sección
de Pilar fue aprobado en 1886, había ideado igual apropiación
de la faja cedida a Billinghurst, en virtud del mismo razonamiento
que Ferrocarril al Pacifico. Como la construcción de las
vías de ambas Empresas en esa sección se hiciera
simultáneamente, en setiembre de 1886 se encontraron ambas
avanzando en direcciones contrarias frente a "San Miguel",
es decir, en la calle ya citada y donde cada una de ambas Empresas
pretendía apropiarse la faja de tierra que hubo de cederse
a Billinghurst, para un proyecto que hubo de llevarse a efecto.
Entonces, tanto la Empresa Clark como la Empresa Lacroze arribaron al singular
arreglo, -disponiendo de esa calle cono bien propio- de colocarse
cada una en uno de sus costados. El Tranway del señor Lacroze
cumplió lo convenido, colocando su vía al costado
de una vereda que se dejaba libre al frente de las propiedades,
circunstancia re-querida para su servicio como tranway; pero el
Ferrocarril, faltando a lo estipulado, modificó muy poco
su trazado, estableciendo dos curvas en plena calle que obligaban
a aproximarse considerablemente al Tranway, y dejando por lo tanto
para la vía pública una pequeña faja que
en parte se reducía a ocho metros.
Para demostrar más claramente el trazado impropio de ese Ferrocarril,
se adjunta un plano especial por el cual se muestra el trazado
primitivo de la calle mencionada, la situación de las líneas
férreas y de la del terreno comprado por el señor
Clark a los sucesores del señor Iraola para la Estación
del Ferrocarril. En ese plano se vé gráfica y elocuentemente
el tamaño abuso cometido.
Pero realizaron su expropiación valídos
de que la crisis de 1875 había postrado a la "Sociedad
Fomento", como a tantas otras empresas especuladoras
en tierra en aquella época, y de que, como los
terrenos poco valían, nadie se curaba de los intereses
sociales, por lo cual la impunidad era conl01eta. Pero
el vecindario existente entonces se indignó ante
una conducta semejante, y formuló una protesta
que fue elevada a la Municipalidad de Moreno, la cual
por su parte, en 19 de febrero de 1886, inició
otro expediente, que junto con el de la protesta del vecindario
fueron elevados al Ministerio de la Provincia, en setiembre
9 de 1886, para su resolución correspondiente.
Como la ley nacional de ferrocarriles de setiembre 9 de
1872, prohíbe en el inciso 2° artículo
15, el establecimiento de vías férreas a
lo largo de los caminos, la actitud del Ferrocarril al
Pacifico era aún mas indisculpable.
Pero no pararon ahí los avances de este Ferrocarril. No se contentó
con apropiarse la citada faja de tierra para la vía, terreno
a un costado para establecer sus galpones, etc., pero le pareció
mas barato construir el edificio de la Estación de pasajeros
del otro lado, en plena calle pública. Para excusar este
escandaloso proceder no había nada que invocar, porque
la pretendida faja Billinghurst no se ocupaba de esto.
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